martes, 20 de marzo de 2012

Crítica The Artist


The Artist fue la sensación y a la vez, la gran ganadora de la temporada de premios recientemente culminada. Apareció esplendorosamente en Cannes con el premio al mejor actor para Jean Dujardin, y de allí no se detuvo en ningún momento. Arrasó con todo, ganó Oscar, Globo de Oro, Critic´s Choice, Cesar, Independent Spirit, Australian Film y el Goya a Mejor Película Europea. Amada por la mayoría y cuestionada por algunos, el filme francés apareció en el momento justo en que cintas como Hugo y Midnight in Paris se basaban en la nostalgia de una época pasada, en los recuerdos y en la capital gala. Considerando todo eso, lo que mejor agrupaba todos esos aspectos, era la realización de Michel Hazanavicius.

George Valentin (Dujardin) es la estrella del séptimo arte. Se siente importante y se lo demuestra el productor, el público y la joven aspirante a actriz Peppy Miller (Bérénice Bejo), quien cae rendida ante los encantos del actor. Todo marcha bien con Valentin, pese a la mala relación con su esposa, pues lo primordial en su vida son sus filmes con su fiel compañero de reparto, el perro Uggie.  Lamentablemente para él, aparece el cine sonoro, y su orgullo y soberbia lo hace renegar de dicho experimento, lo cual termina dejándolo en el olvido, mientras que Peppy comienza a escalar en la escena cinéfila. Ese juego entre el olvido de lo pasado y el encantamiento ante lo nuevo, es parte de la mezcla que nos entrega The Artist.

El filme es un homenaje a un cine que ya no existe. Una realización arriesgada, nadie en su sano juicio se atrevería en estos momentos a hacer una película en blanco y negro y muda. Sobre todo franceses que se atreven a cruzar el Atlántico, llegar a Hollywood y sumar actores de experiencia y reconocidos por los espectadores, como John Goodman, James Cromwell o Malcolm McDowell, e invitarlos a participar de esta experiencia. Se aplaude el riesgo del productor Thomas Langmann y se valora el trabajo de Hazanavicius. Además existe una excelente labor de Ludovic Bource en la banda sonora, además de una fotografía, dirección artística y diseño de vestuario al más alto nivel. Pero el guión es flojo, pese a que se considera la dificultad que debe representar realizar un trabajo en una cinta con las características de The Artist. Es una historia linda, que uno la ve con una sonrisa en el rostro y que se disfruta bastante, pero no llena ni te deja satisfecha la realización en su conjunto. Está llena de clichés y si fuera una obra que no estuviera en blanco y negro y muda, con los diálogos que tiene, no pasaría de ser solamente una película correcta. No sería tan celebrada.

Lo que si es digno y merecedor de aplaudir, es la inconmensurable labor de Jean Dujardin. El actor galo es quien tiene todo el peso de la realización sobre sus hombros, y eso hace que el filme se disfrute a cabalidad. El encanto, carisma, ángel y talento del francés es innegable. Lo hace todo perfecto, gestualiza de mil maravillas. Si el cine fuera mudo, estaría a la altura de George Valentin, sería la estrella mundial. Habrá que verlo en las realizaciones sonoras, además de ver si su acento no le impediría un desembarco en Estados Unidos, pero la gran aparición del filme, tal como fue en Cannes, es Dujardin. Bejo está correcta, tiene ángel también e ilumina la pantalla, pero queda opacada por la presencia de su coprotagonista. Una buena labor, pero no tan destacable. El resto del reparto aparece poco, todos bien en los pocos minutos que figuran, y se debe destacar la buena labor de casting, pues son los actores estuvieron muy bien elegidos, principalmente John Goodman.


The Artist más que ser una buena película, es una linda realización. De esas obras disfrutables, enternecedoras, pero que con el tiempo van quedando en el olvido. No es una obra maestra o un filme perdurable. Si es destacable la valentía de su productor y director, aunque Hazanavicius no logra facturar a la vez un guión excelente. Lo que si se recordará con el tiempo es la actuación de Dujardin, en lo impresionante que es ver a un intérprete imponerse en la pantalla solo con su presencia y carisma. Verlo bailar es una delicia y sus escenas con Uggie son impagables. The Artist está solo bien, Dujardin está superior.

Calificación: 6,5

5 comentarios:

Mike Lee dijo...

Pues sí, me pareció una buena película, muy curiosa por el hecho de que esté rodada en blanco y negro y sea muda frente a los medios actuales, pero creo que han exagerado un poco con todos los premios que la han dado.

¡Saludos!

Daniel Bermeo dijo...

Pues aunque la disfruté un poco más que tú no puedo dejar de estar de acuerdo en muchos aspectos, como lo que citas de que si no fuese una película muda con los diálogos que tiene pasaria de ser tan celebrada como lo ha sido.

Pero hay que reconocer que ha corrido un gran riesgo y eso tambien es de aplaudir.

Saludos!!

Mario Salazar dijo...

Yo creo que en efecto es una cinta pequeña pero perfecta, son de esas obras redondas que cada cosa está en su respectivo lugar, si que es linda y eso no es demérito sino algo para sentirse bien con el cine, que implica madurez porque también nos habla de un cambio histórico pero desde las emociones de una personaje, una obra maestra no solo vale por su complejidad sino por su desarrollo desde sus características, visto bien quitarle el mérito de aludir al cine mudo , fingir que es tal, es como quitar una virtud que otros no han pensado, nuevamente un solo detalle puede hacer algo maravilloso. Seguro no será una cinta para decir con orgullo intelectual que es gigantesca pero verla es disfrutar, se critica el aprecio de la mayoría hacia algo pero ésta vez siendo una cinta muy pequeña y realmente fácil es algo que se buscara como placer instantáneo, una fantasía para adultos. Un abrazo.

Dialoguista dijo...

Esta es una visita relámpago, para avisarte que mañana cierra el plazo para mandar los votos. Espero tu papeleta!!! Saludos!!!

P.D.: Y ya cuando termine con los nominados me daré una vuelta para leer como corresponde, que odio visitar a las apuradas :S

Sebastian N. dijo...

Hola soy Sebastián, escritor y editor de Film Focus, un blog dedicado a la publicación de festivales, ciclos y proyecciones cinematográficas con el fin de promover la cultura cinéfila. Este año estoy organizando un proyecto entre-blogs llamado Maratón de Cine Bloggers 2012 y quisiera que formes parte del proyecto (filmfocus-la.blogspot.com/2012/03/maraton-de-cine-bloggers-2012.html). Espero tu respuesta. Desde ya muchas gracias.

Sebastián Nadilo